Algunos medios afirman que el presidente de EE.UU. propondría un
proyecto de paz, confeccionado junto al rey de Jordania, imposible de
rechazar.
Barack Obama, el presidente de los EE.UU., propondría en su próxima
visita en Egipto, un plan de paz que daría solución al conflicto de
Israel con sus vecinos palestinos y árabes, según afirma el buen diario
árabe El Kutz El Arabi, que aparece en Londres.
Los detalles
del plan habían sido adelantados días atrás por el rey Abdallah de
Jordania, quien sirve de asesor de Obama en la elaboración del plan,
pero tras la reunión de Obama con el primer ministro israelí, Benjamin
Netanyahu, quedó en claro que sólo una intervención exterior podrá
hacer mover adelante al gobierno de la derecha en Israel.
Cuando
Netanyahu aún intentaba describir como un éxito su reunión del lunes
pasado con el presidente estadounidense, alabando los acuerdos a los
que se había llegado para seguir discutiendo los temas en los que no
acordaron, la noticia sobre el anuncio del programa de paz en El cairo
tomaron Netanyahu y a la derecha israelí desprevenidos, ya que tiene
señales de "una propuesta imposible de rechazar".
Según fuentes árabes y norteamericanas, la propuesta que se elevaría en El Cairo, incluiría seis puntos principales:
-
Los refugiados palestinos recibirían ciudadanía en sus países de
residencia y serían compensados económicamente por un organismo con
apoyo internacional.
- Quienes deseen regresar a territorios
palestinos podrán hacerlo pero solo dentro de las fronteras del Estado
Palestino, en Cisjordania y Gaza.
- Se proclamará un Estado
palestino desmilitarizado pero con una fuerte presencia policial, cuya
capital será Jerusalén Oriental.
- Israel tendrá paz con 57 países árabes y musulmanes, incluyendo el establecimiento de relaciones diplomáticas, banderas.
- La ciudad antigua de Jerusalén y los lugares santos estarán bajo soberanía internacional y control de las Naciones Unidas.
- Las fronteras definitivas se establecerán en base a intercambio de territorios acordados.
Si
bien todavía no hay confirmación oficial acerca del anuncio del
programa de paz de Obama, en Israel comenzaron ya las reacciones. Uno
de los primeros en reaccionar fue Silvan Shalom, canciller durante el
anterior gobierno de de la derecha y hoy vicejefe de Gobierno que
reemplazará a Netanyahu durante el viaje a Washington: "Arabes y
norteamericanos deben tomar en cuenta que Jerusalén no será dividida.
Pero para que realmente no lo sea, no podemos decir que no a toda
concesión".
proyecto de paz, confeccionado junto al rey de Jordania, imposible de
rechazar.
Barack Obama, el presidente de los EE.UU., propondría en su próxima
visita en Egipto, un plan de paz que daría solución al conflicto de
Israel con sus vecinos palestinos y árabes, según afirma el buen diario
árabe El Kutz El Arabi, que aparece en Londres.
Los detalles
del plan habían sido adelantados días atrás por el rey Abdallah de
Jordania, quien sirve de asesor de Obama en la elaboración del plan,
pero tras la reunión de Obama con el primer ministro israelí, Benjamin
Netanyahu, quedó en claro que sólo una intervención exterior podrá
hacer mover adelante al gobierno de la derecha en Israel.
Cuando
Netanyahu aún intentaba describir como un éxito su reunión del lunes
pasado con el presidente estadounidense, alabando los acuerdos a los
que se había llegado para seguir discutiendo los temas en los que no
acordaron, la noticia sobre el anuncio del programa de paz en El cairo
tomaron Netanyahu y a la derecha israelí desprevenidos, ya que tiene
señales de "una propuesta imposible de rechazar".
Según fuentes árabes y norteamericanas, la propuesta que se elevaría en El Cairo, incluiría seis puntos principales:
-
Los refugiados palestinos recibirían ciudadanía en sus países de
residencia y serían compensados económicamente por un organismo con
apoyo internacional.
- Quienes deseen regresar a territorios
palestinos podrán hacerlo pero solo dentro de las fronteras del Estado
Palestino, en Cisjordania y Gaza.
- Se proclamará un Estado
palestino desmilitarizado pero con una fuerte presencia policial, cuya
capital será Jerusalén Oriental.
- Israel tendrá paz con 57 países árabes y musulmanes, incluyendo el establecimiento de relaciones diplomáticas, banderas.
- La ciudad antigua de Jerusalén y los lugares santos estarán bajo soberanía internacional y control de las Naciones Unidas.
- Las fronteras definitivas se establecerán en base a intercambio de territorios acordados.
Si
bien todavía no hay confirmación oficial acerca del anuncio del
programa de paz de Obama, en Israel comenzaron ya las reacciones. Uno
de los primeros en reaccionar fue Silvan Shalom, canciller durante el
anterior gobierno de de la derecha y hoy vicejefe de Gobierno que
reemplazará a Netanyahu durante el viaje a Washington: "Arabes y
norteamericanos deben tomar en cuenta que Jerusalén no será dividida.
Pero para que realmente no lo sea, no podemos decir que no a toda
concesión".